¿De qué hablamos cuando hablamos de HTML5?

El sábado pasado, a partir del pedido de Sarah Doherty, di una charla en las III Jornadas Interuniversitarias de Ciencias de la Computación en Caracas, Venezuela, a través de videoconferencia. La charla fue una introducción a HTML5 y un punteo por algunas de las características que estarán disponibles en el próximo Firefox 4. Lamentablemente los escasos recursos de mi netbook, sumados al desastre que le sucedió cuando instalé Audacity, impidieron que grabara la charla.

[caption id=“attachment_532” align=“aligncenter” width=“300” caption=“La pantalla donde aparecía mi imagen, obviamente salí con los ojos cerrados.”]La pantalla donde aparecía mi imagen, obviamente salí con los ojos cerrados[/caption]

Por lo que me comentaron desde Caracas y por la cantidad de preguntas que recibí al final, puedo decir que salió muy bien. Si bien al principio pensé que iba a ser mejor no «ver» a mi público para ponerme menos nervioso, hablarle a la pantalla de mi notebook no terminó siendo algo muy placentero.

La charla la centré en las principales etiquetas nuevas que incorpora HTML5 y en destacar la diferencia conceptual frente a las versiones anteriores, con la nueva preparada y pensada a partir de los sitios web como aplicaciones en la «nube». Así aparecen herramientas como la posibilidad de que el sitio web funcione cuando no haya conexión, el «drag & drop», canvas y tantas otras.

Acá podés descargar la presentación en formato svg, que podés abrir con cualquier navegador moderno.

Pero lo que hace más interesante al HTML5 es que permite que nuevamente todas las partes de una página web sean manipulables sin la necesidad de plugins de terceros. Y un gran paso en este sentido es la inclusión de las etiquetas audio y video para reproducir archivos multimedia que puedan ser controlados como si fueran imágenes. Una de las claves para que la Web sea abierta es que exista la posibilidad de incorporar multimedia sin depender de terceros ni de tecnologías con patentes.

Cuando se discutía el borrador de la especificación de las etiquetas audio y video se intentó incluir dentro de la misma que debía existir un codec estandar, libre y sin patentes, para asegurar que cualquier persona pudiera subir contenido. Ante la presión de algunos integrantes del grupo que redactaba la recomendación finalmente no se incluyó esta necesidad. aunque la derrota en aquel momento tuvo hoy, 20 de mayo de 2010, el comienzo de una revancha con el anuncio de Google, propietaria de ON2 de la liberación del código del formato de video para Internet VP8 y liberado de sus patentes.

El anuncio se dio en el marco de la conferencia I/O y contó con la participación de Mozilla y Opera para la presentación del grupo WebM integrado por muchas organizaciones y empresas relacionadas con el video, lo que asegura la existencia de todas las partes necesarias para que el formato tenga éxito. Como primer anuncio, los tres navegadores pusieron a disposición de los usuarios versiones de prueba de sus navegadores que pueden reproducir videos con este formato sin la necesidad de instalar nada más. Y Google anunció que YouTUbe usará este formato para codificar los videos de ahora en más (además de estar convirtiendo los videos que ya están almacenados en el sitio).

Aunque ya empezó la discusión sobre cuál formato de video permite mayor calidad (h264 o VP8), y siempre aparecerán empresas que disputarán que el formato viola alguna de las patentes que tienen (esto en los países que tienen patentes de software), lo más importante está hecho: un formato libre y de buena calidad para que cualquier persona pueda subir contenido multimedia a Internet sin miedo a que le pidan dinero por haberlo hecho.